Por José Carlos Bustos Montoya
CULTO A LA NUESTRO PATRONA DE NASCA
“Cuenta la historia, recogida de los relatos orales de nuestros ancestros; que nuestros antepasados en los albores del XIX, solían ir de pesca a las playas en busca de lenguados, cangrejos y mariscos, y otras especies en nutridos grupos de personas, lejos de puerto Caballa; a San Nicolás, Tres hermanas, San Ana, buscando aprovisionarse también de sal, y cazar algunas tarucas, (ciervos silvestres) y vizcachas.
Estas travesías, se hacían en recuas de mulas, y caravanas, es así como, los pescadores de algunos poblados vecinos que también pescaban por allí, tuvieron noticias de que, en las playas de la Bahía de San Nicolás se había hallado varado por el mar, un cajón de madera negra oscura, conteniendo la bella imagen de una Virgen, que se suponía seria parte del cargamento de un galeón español, que motivos desconocidos, encalló en alta mar. Este hallazgo tuvo lugar en la bahía de San Nicolás, aproximadamente en Julio del año 1810; por un pastor recordado con el nombre de "Miguelín".
Por aquel entonces cundió la noticia por las localidades más próximas, como Yauca, Acarí, Palpa, Ica y Pisco, las mismas que se organizaron y formaron grupos de expedición para llevarse la preciada carga a sus respectivos lugares, pero cuenta la tradición que fue un designio divino el que fracasaran en su intento cada una de ellas, pues sucedieron hechos inexplicables, como el que las mulas que jalaban el carruaje con dicha carga no querían moverse, pareciendo estar pegadas al suelo; en otras, los jumentos se sentían tan cansados que no había forma de levantarlos; así como también un grupo expedicionario no pudo dirigirse a su pueblo con la carga a cuesta por presentarse fuertes "paracas" que se les imposibilitaban avanzar, temiendo perderse en el camino de tal manera que dejaron la carga en el lugar del hallazgo. Estos y otros obstáculos hicieron comprender a los postulantes que dicha imagen no estaba destinada para ellos.
En la plaza mayor de la Villa de Nasca, que en aquel tiempo se encontraba rodeada por algunas casas, "rancherías", capilla principal y la casa del gobernador. Los pobladores se dieron cita en ella para organizarse pidiendo la creación de una expedición al mando del padre Fray Pedro de Sotil (de la orden de “Los Frailes Ermitaños de San Agustín”), quien formó una comitiva encabezada por el mismo y solicitó a los pobladores de esta Villa conseguir unas buenas recuas de bestias de carga para traer la imagen, si esa fuese la voluntad divina.
La comitiva organizada llegó al sitio donde se encontraba la sagrada imagen, un día claro, sereno, con buen tiempo y según se dice, los pobladores durante el regreso no encontraron ningún obstáculo alguno, al contrario, la carga se hizo tan ligera que las mulas apuraban el trote, como queriendo llegar cuanto antes al lugar elegido.
Durante varios días hubo cierta incertidumbre entre los lugareños, pues creían que la sagrada imagen había sido llevada a otro pueblo, pero fue gratísima la sorpresa, cuando adelantándose al resto de la comitiva se presentó el padre Fray Pedro de Sotil, para comunicar a los pobladores que pronto la Virgen estaría en esta Villa de Nasca y que era necesario proporcionarle un altar en la capilla de ese entonces. Con el repique de campanas y entusiastas vítores de alegría, fue recibida la comitiva en la Plaza de Armas de la Villa de Nasca, por los principales del lugar, y la feligresía en general, portando el cajón de la Sagrada Imagen de la Virgen y según el relato de los lugareños, la mula portadora de la carga llegó a doblar sus patas y recostóse en un lugar distante de la Capilla Principal,(la capilla principal quedaba donde fue el hospital antiguo hoy la beneficencia de Nasca, y el local de la Cruz Roja) hecho que se tomó como un aviso para que allí se le construyera el templo para su veneración, edificándose ésta al frente de la Plaza de Armas y que posteriormente fue destruida por el terremoto del año 1942. Actualmente es la Iglesia Matriz la que cobija la sagrada imagen de la Patrona de Nasca,”Santísima Virgen de Guadalupe”
(4) Leyenda popular, de autor desconocido.
Las discusiones posteriores, eran establecer que advocación era, de que representación era, se sabía que era de origen española, pero no se sabía su origen, los padres “Ermitaños de San Agustín “, que regentaban la parroquia Santiago Apóstol, procedieron hacer las indagaciones y a enviar varios propios con documentos a las autoridades eclesiásticas, con la descripción de la imagen, y saber de una vez por todas el nombre de esta bella representación, hasta que al fin se llegó a determinar, que era la imagen de “Virgen María de Guadalupe” del pueblo de Cáceres de Extremadura, veneración muy difundida en toda la España antigua, partiendo de la aparición en Extremadura al pastor Gil Cordero en el rio Guadalupe, de donde tomo su nombre.
Sin embargo El padre Alberto Rossel castro en su obra “Caciques y Templos de Ica “capítulo XIII, Parroquia de Santiago Apóstol de Nasca, pp. 116 (5) se lee : “El patrón de esta parroquia es el Apóstol Santiago. El pueblo se ha olvidado de celebrar la fiesta de su patrón, la patrona antigua fue Nuestra señora de la Candelaria.
En el libro de Cofradía se encabeza así:
También en ese misma Obra, en el mismo capítulo, pp.117 (6) dice “En 1,760, se rendía culto, también a Nuestra Señora de Guadalupe, la virgen española, sin denominarla de patrona” continua así el autor “desde que se dejó de rendir culto a la Santísima Virgen de la Candelaria, asumió, por el voto del pueblo, el rango de patrona, Nuestra Señora de Guadalupe” textos que lamentablemente el autor no consigna fuentes, bibliográficas ni de archivos.
Estos datos colisionan con la leyenda popular, que establecen como año de la advocación 1,810.
(sigamos durante la semana las VI partes de esta importante obra)