lunes, 26 de julio de 2010

IN MEMORIAM DE UN GRAN AMIGO UGO UGOLOTTI FOSCHI

Ugo nació en el pueblo de Belluno, Región de Bereto, al norte de Italia, un 15 de enero de 1943.

Sus padres fueron: Don Bruno Ugolotti y doña Silvana Foschi, que hasta hoy vive entre nosotros.

El mismo nos contaba con añoranza que en 1948, cuando tenía recién 5 años, llegó con sus padres en un gran barco mercante desde Italia, con sus maletas vacías, pero a la vez llenas de esperanza.

Conoció el Perú rápidamente, por que a las pocas semanas de su arribo, ya estaban partiendo para las minas de Gollariquizga en Cerro de Pasco, donde su padre trabajaría como ingeniero de minas.

Cuando ya jovencito y estudiaba en el Colegio Salesianos, esperaba con ansias las benditas vacaciones para venirse a Nasca, para corretear con sus amigos en la Hacienda Las Trancas, donde su Tía “Nucha” estaba casada con uno de los dueños, Ginetto Conetta.

Esos años en “Las Trancas” calaron muy hondo en el corazón de Ugo, ya que de aquella época nace su amor por esta su Nasca querida, tierra que fue su ayer, fue su presente y su mañana. El siempre recordaba con nostalgia sus paseos a caballo, manejando tractor o camionetas.

Gracias a una crisis familiar tuvo que empezar a trabajar desde los 20 años de edad, para así ayudar en el sustento de su casa materna y el estudio de sus hermanas menores: Cristina y Laura.

Ugo tenía un corazón tan grande, tan grande, que iba acorde con su estatura. Amó entrañablemente a su querida madre, con un cariño que todos debemos cultivar.

Fue un padre mimoso y engreidor con sus hijos Maurizzio, Renato, Ornella y Carla ,y ni que decir como abuelo , cariñoso al extremo con sus nietos Nicole, Samantha, Fabiano y Rafaella, que deben haberlo extrañado mucho de ese viaje que nunca regresó.

Muchos dicen que en un sepelio ó recordatorio no hay muerto malo, pero con Ugo eso no va, por que Ugo fue bueno de verdad. El en vida fue un niño grande, reilón, bonachón, sincero, bondadoso sin limites, al extremo que no sabía decir NO; pero sobretodo, tuvo una virtud muy grande que pocos la cultivamos, fue profundamente HUMILDE en sus sentimientos y en su comportamiento.

Ugo sembraba amistades por donde pisaba, por que daba mucho a cuenta de nada. Nasca en ese sentido le debe muchísimo, por que Ugo hizo grandes gestiones para que las autoridades y funcionarios del sector le dieran la importancia que el rubro de turismo requería.
Compartía sus inquietudes, deseos y proyectos para Nasca con Giuseppe Orefici, Giorgio y Gabriella Antonini, Josué Lancho, Aurelio Perla, quienes para él más que amigos eran sus “hermanos”.

Ugo era un empresario a carta cabal: primero fue gerente y socio de la Agencia de Turismo Giulia Perú, para después tener su propia Agencia Silvana Tours. En el rubro de servicios primero fue copropietario de la Pizzería “La Púa” para después crecer con “El Portón “y “Tu Candela”; en el rubro de hotelería primero fue dueño de su sueño dorado:”Tampu Mayu” para después proyectarse en otros que ya venían, junto con su socia y amiga Elizabeth Scarpati , con quien compartió sus horas finales, pero sueños que no se fueron con su trágica muerte, por que algún día se cumplirán.

Uguito, te recordaremos eternamente, ya sea sentado en tu esquina del Portón, bañándote en la Playa Libertad o viajando en las alas de tu ilusión a tu Tampu Mayu querido.

Ugo, te queremos mucho, descansa en paz.

Tus amigos.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Disculpe .. donde esta el nombre de la esposa, perdon mi abuela. PDP mi nombre se esbribe con doble F tambien. Y el de mi padre una z.

Anónimo dijo...

Entonces usted es Rafaella?