viernes, 27 de marzo de 2009

En el día mundial del Teatro recordemos al actor nasqueño Chilo Falcón.

Miguel Oblitas Bustamante (Nasca del Perú)

Hoy se celebra en todos los rincones del planeta el día mundial del Teatro. Este maravilloso arte -cuyos orígenes se encuentran en la India mística de la cultura Védica- fue llevado a Europa por los inmigrantes Indoarios que poblaron Grecia.

En el mundo andino de nuestros antepasados, se encuentran cuentos orales y manifestaciones quechuas que se transliteraron a la lengua hispana generándose un teatro mestizo. Luego las diferentes corrientes del teatro a través de los últimos 500 años han derivado en el eclecticismo artístico moderno.

El teatro unido a la música se convirtió en ópera, singspiel, zarzuela, opera comique, opereta, y posteriormente engendró al septimo arte el Cine.

En nuestra querida Nasca del siglo XX existió un personaje muy peculiar Don Chilo Falcón. El como nadie en nuestra tierra supo representar como actor innumerable cantidad de personajes. De igual manera debemos mencionar que el profesor Miguel Cordero Hernandez escribiera alguna obras de Teatro que aún se representan en Changuillo.


Esta semblanza (escrita por Esperanza Navarro Pantac) aparece en el libro "Cronista de Nasca" (Lima, 2008), de Salvador Navarro Cossio.


Basilio Bernardino Falcón Flores (Nasca, 1904-1986), fue hijo de don Eloy Falcón.
Muy joven viajó a Lima, donde se dedicó a la actuación;enrolado en una compañía de teatro viajó por todo el país haciendo representaciones de gran éxito provinciano. Cuando la gira se hizo extensiva a Chile, don Chilo desistió de abandonar su patria por amor a su madre.

Regresó a Nasca, donde se dedicó a la preparación de gallos de pelea a navaja con técnicas aprendidas de su padre. Fue también pintor de brocha gorda y bailaba maravillosamente el paso doble, participaba en cuanta representación teatral hubiera en Nasca. se le recuerda en especial por la obra que escenificó en el escenario del Cine Teatro de Nasca con Emilia Arcos, quien casó después con Hernán Lancho.

Su carismática persona no pasaba desapercibida en la la localidad: cada día representaba un personaje diferente, caracterizado como tal, tomaba asiento en una banca de la plaza de armas (aquella que ya no existe), frente a la Municipalidad (que tampoco existe) y departía con los viandantes haciendo gala de humor y picardía con las más divertidas ocurrencias.De ello derivó, en sus últimos años, su afición a narrador de cuentos de terror -siempre en su habitual banca- que reunía un buen número de oyentes entre niños, jóvenes y curiosos.

Querido Chilo Falcón, los que te hemos conocido te recordamos con mucho cariño en este Día Internacional del Teatro.

Tengo la seguridad que en el plano que te encuentres estás compartiendo tus dotes histriónicos con aquellas almas afines a tu arte.

Viva Chilo Falcón.

No hay comentarios: